El 5 de junio de cada año se conmemora el Día Mundial del Medioambiente desde 1973. Por eso, para este mes elegimos abordar un tema de gran interés entre muchos de nuestros clientes: la producción industrial con conciencia ambiental.
Independientemente del tamaño de las compañías, la producción industrial con conciencia ambiental significa, en principio, asumir la responsabilidad con respecto al cuidado del planeta.
En ese sentido, la producción más limpia comprende 3 grandes acciones que inciden en todo el ciclo de vida de los bienes, desde la obtención de las materias primas hasta el manejo de los residuos:
- Prevenir, controlar, atenuar, restaurar y/o compensar los riesgos e impactos para los seres humanos y el ambiente.
- Optimizar y minimizar los recursos y servicios utilizados para crear los productos.
- Incrementar la eficiencia operativa.
Las empresas que están apoyando esta manera de hacer negocios reconocen que toda cadena de producción es perfectible; así lo han interiorizado en su cultura corporativa para que se traduzca en acciones concretas, y no se quede solo en palabras o documentos internos.
En la práctica, la producción industrial con conciencia ambiental puede abarcar cambios operacionales rápidos y fáciles de implementar. No obstante, a partir de nuestra experiencia con los clientes de este sector, las empresas también necesitan adecuar sus instalaciones o construir otras completamente nuevas que les permitan tomar medidas como las siguientes:
- Rediseñar distintos procesos, e incluso los mismos productos que se fabrican.
- Modificar la tecnología en planta.
- Hacer un uso más racional del agua.
- Tratar y reutilizar las aguas residuales.
- Realizar una correcta segregación, manipulación, almacenamiento y disposición de todo tipo de residuos.
- Implementar planes de monitoreo de emisiones gaseosas; y también para convertir gases contaminantes en gases inocuos.
- Instalar barreras de aislamiento acústico para disminuir los niveles de ruido.
- Lograr que todos los espacios sean energéticamente sostenibles.
- Reciclar para conseguir la recuperación total o parcial de la materia prima.
7 beneficios de peso
Cuando una empresa realiza una producción más limpia puede:
- Mejorar su productividad y rentabilidad, como resultado del mayor aprovechamiento de los recursos y de una mayor eficiencia en los procesos.
- Reforzar su posicionamiento, reputación y reconocimiento en los mercados.
- Fortalecer sus relaciones con comunidades vecinas, proveedores y socios.
- Ofrecer productos con valores agregados que motivan la compra de personas con mayor conciencia y preocupación por las condiciones del planeta.
- Convertirse en un referente del buen desempeño ambiental a escala local, nacional o regional.
- Responder con mayor agilidad a los cambios en materia de leyes, normas y estándares ambientales, que han adquirido mayor relevancia frente a las amenazas de la contaminación y del cambio climático.
- Mejorar su ambiente laboral en materia de seguridad industrial, innovación y motivación.