Conoce sobre las ventajas, los retos y el uso que ya se está dando a este tipo de tecnologías en proyectos de América Latina y a nivel mundial, así como los resultados que su uso ha presentado frente a eventos sísmicos de gran magnitud.
¿Por qué hoy se ve factible el aislamiento, pero en años anteriores se veía como algo más lejano? ¿Será una tendencia que viene fuerte para Latinoamérica?
De acuerdo con su experiencia, el Dr. Carlos Méndez ha identificado varios factores que hacen que el aislamiento sísmico se vea como algo cada vez más factible en los proyectos de construcción en Latinoamérica. Dichos factores se resumen en:
- Costo: Anteriormente los costos de integrar aisladores sísmicos en un edificio eran mucho más altos que en la actualidad; ahora existen más compañías que ofrecen esta tecnología, la cual además se ha hecho más accesible gracias a las patentes. Dicha accesibilidad permite que los desarrolladores inmobiliarios consideren con mayor facilidad el aislamiento sísmico para sus proyectos.
- Avances: Hemos sido testigos de grandes avances en la Ingeniería Estructural y en los sistemas de computación, los cuales han permitido hacer un análisis mucho más refinado que lo que podía lograrse antes; por ejemplo análisis no lineales, y de historia del tiempo, los cuales permiten entender mejor el comportamiento de las estructuras, y a la vez hace posible considerar y evaluar mejor el desempeño de este tipo de dispositivos.
- Mayor Preparación: Los Ingenieros Estructurales en Latinoamérica están más preparados y actualizados el día de hoy; con lo cual también tienen una mentalidad más abierta para considerar el uso de estas nuevas tecnologías. Es natural que aún se perciba cierta resistencia, lo cual es entendible cuando se trata de cualquier tecnología nueva, sin embargo es claro cómo paulatinamente cambia la mentalidad y ahora es de conocimiento común que pueden aplicarse estrategias para no tener daños tan graves en las estructuras, en el evento de un terremoto de gran magnitud.
- Eficiencia Demostrada: Un ejemplo útil de observar es Japón, un país en el que estas tecnologías han sido ampliamente utilizadas desde hace algún tiempo, y han podido demostrar su eficiencia en eventos fuertes, tal como el terremoto que dicho país sufrió en 2011. A pesar de la gran cantidad de daños sufridos y víctimas del evento de 2011, el mayor daño fue provocado por el tsunami, mientras que el causado directamente por el terremoto fue considerablemente bajo, teniendo en cuenta la magnitud del mismo. Por otro lado, en Latinoamérica también hemos visto estas estrategias en funcionamiento, aunque en menor escala, especialmente en países como México en el evento de 2017 y Chile en 2010; en donde las estructuras que contaban con la tecnología de aislamiento demostraron ampliamente su eficiencia.
¿Qué retos y oportunidades hay en Arquitectura, gracias al uso de aislamientos?
El Dr. Héctor Monzón considera que una de las oportunidades en este sentido, es que se puede reducir el número de muros, es decir el volumen de los elementos estructurales se reduce. Es natural que existan circunstancias especiales en los terrenos que hacen que el proyecto tenga irregularidades, por lo cual debe diseñarse tomándolas en cuenta; sin embargo, al igual que los proyectos convencionales, es deseable que las edificaciones sean regulares. El principal incentivo para mantener la regularidad del proyecto es el precio, ya que mientras más irregular sea la estructura, más aislamientos se necesitarán debido a que su movimiento es más complejo en el evento de un sismo; por lo cual el precio individual de muchos elevadores se incrementará. El Dr. Monzón resalta que es importante tener en cuenta que la aplicación de aislamiento sismo-resistente no debe considerarse como una invitación a que el proyecto sea diseñado de manera sumamente irregular.
¿Qué oportunidades presenta el aislamiento desde el punto de vista económico, y cómo puede analizarse el impacto económico en la estructura?
Existe un gran potencial de ahorro, aunque ello no debe ser el principal objetivo de usar los dispositivos; saber que se construirá un edificio más seguro y sustentable durante su vida útil, por medio de la utilización de dispositivos de aislamiento sísmico debería ser suficiente incentivo para utilizarlos.
Normalmente por el potencial de reducir muros, y de hacer más esbeltos los elementos estructurales, hay una importante oportunidad de optimización en la superestructura del edificio. Ese ahorro es tal, que muy probablemente permitirá pagar el uso de dichos dispositivos. Eso significa que prácticamente podría tratarse del mismo costo, pero un edificio sin dispositivos tiene muchísimas más probabilidades de presentar problemas estructurales o secundarios al ocurrir un terremoto de gran magnitud. Por otro lado, seguramente dicho edificio no podrá operar inmediatamente después del evento, y por lo mismo, seguramente también requerirá un análisis y revisión de su fundición. Por el contrario, el edificio que sí utiliza los dispositivos no enfrentará dichos problemas y podrá continuar en operación de inmediato, sin perder valioso tiempo después del evento sísmico.
¿Qué puede ganar el usuario viviendo o habitando en un edificio con aisladores sísmicos?
De acuerdo a su experiencia, el Dr. Monzón considera que existen dos beneficios principales:
- Continuidad de Operación. Es muy importante considerar que la probabilidad de tener una operación ininterrumpida del edificio después de un evento es muy alta, especialmente si consideramos que el sismo afectará a varios edificios alrededor, con lo cual no se podrá dar atención especial a solo uno de ellos, porque habrá mucha demanda por reparaciones. El valor de no perder la continuidad de operación es muy alto; particularmente si hablamos de edificaciones destinadas a espacios de oficinas o comerciales, en los cuales dicha continuidad se traduce en productividad y rentabilidad.
- El usuario tendrá un daño mucho menor al contenido de su vivienda o lugar de ocupación (por ejemplo, una oficina o espacio comercial), y probablemente no sienta cuando ocurre un sismo, lo cual también se traduce en una gran comodidad para él.
Debe considerarse esta tecnología como un paso adelante en las estrategias de construcción y desarrollo inmobiliario, aunque actualmente también se trabaja con otros métodos muy eficientes.
Desde el punto de vista del constructor, ¿Cómo cambia el contrato de construcción al incorporar dichos aisladores sísmicos en su proceso?
De acuerdo a la experiencia del Dr. Méndez, el proceso de instalación no es complejo y tampoco genera un retraso importante en la programación del proyecto de construcción. El impacto de esta instalación en cuanto a tiempo y costo es mínimo. La conexión del sistema es sumamente simple; por ejemplo un edificio en Colombia cuenta con 12 apoyos, los cuales fueron instalados en dos semanas, tiempo que no representa un retraso significativo para el proyecto. Definitivamente, es necesario contemplar el uso de cierto equipo especial tal como grúas y cargadores, lo cual podría ser algo adicional a considerar, sin embargo, eso no representaría un reto grande para un proyecto de construcción.